El ensayo: “Los cerebros que se
van y el corazón que se queda”, de Magali Garcia Rami es magnifico. Me hizo
pensar mucho en mí misma porque mi familia inmigró a los Estados Unidos cuando
yo apenas tenia 4 años. Lloraba todos los días, extrañando como nadie se
imagina a mi país. Especialmente a mi madre que aún seguía allá. A los 22 años
que tengo ahora, ya estoy acostumbrada a vivir aquí. Pero no hay día que no piense
o hable de mi país y de esa vida cotidiana y tranquila que se vive allá. García
Rami menciona en su ensayo que los inmigrantes o cerebros tienden a reunirse
hablar de el país que tratan de no añorar y esa es la realidad.
Cada
vez que viajo a la Republica me toma unas semanas adaptarme. Ya adaptada, no
quisiera regresar a esta país al menos que no sea de visita. Las reuniones
entres vecinos, la confianza, y ese precioso mar que nos rodea, me convierte en
una persona tranquila y en una persona
tan confiada que a veces ni me reconozco. Es algo que no puedo explicar.
Es que allá las personas siempre encuentran un momento para despejar la mente
de los problemas. Y cuando comparo lo que es la vida aquí, viviendo entre
cuatro paredes y la libertad en la Republica de dejar hasta la puerta abierta
me da hasta tristeza. En Nueva York vivo la vida en “autopilot” siguiendo día a
día un programa. En la Republica me paso los días mirando la puesta del sol y
la luna en el mar.
Mientras tanto, las personas que
permanecen allá apenas pueden soñar lo que es la vida aquí. Algunos tienen el
gran anhelo de algún día venir. Quiénes venimos acá trabajamos y guardamos dinero para regresar algún día a
nuestros país. Así como dice García Rami, la realidad es que viajamos a otro
país para buscar una mejor vida. No tiene absolutamente nada que ver con el
país en si, sino con la economía y la delincuencia. Además, queremos que la
generación joven estudie aquí y progresen. Si algún día han de regresar al país
donde nacieron, entonces tienen mas
oportunidades de vivir una mejor vida.
Spanish 416
Fall 2012
Profesora Sonia Rivera-Valdés
Written By: Ana Acosta
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